martes, 7 de octubre de 2008

Sapos


El mundo está lleno de sapos. Algunos parecen inteligentes, otros simpáticos, algunos son hasta bonitos pero todos son sólo sapos. Y yo soy la princesa de los labios de fresa y no me da la gana de besarte para probar si te transformas o no porque lo más probable es que no lo hagas y me quede con cara de asco mirándote y pensando: Mierda, he besado a otro sapo. Así que he de darme a la castidad anfibia, dejar de perder el tiempo observando bichos y concetrarme en cosas valiosas. Como abrir las ventanas para que entre el frío y tomarme un té en el café de las penas, mientras dos niñas me observan cuando cargo con mi vida dejando un rastro de simpatía bajo mis pies de plomo y la gente me aplaude por la calle por ser como soy. Por ejemplo.

2 comentarios:

Carmen dijo...

Durante un microsegundo pensé que tenía ante mi otra "princesa Sapina" pero, no, voy a buscarte tu princesa, Patri, mmmmmmmm... voy a echar un vistazo al libro así me entretengo en mi martes de aburrimiento existencia. Menos mal que siempre quedan los blogs amigos para entretenerse.
Mil besos y, sí, sí, sí, al ron miel!
Carmenchu

Alvaro Claver dijo...

Yo te quiero un montón