No voy a hablar del tema que algunos de vosotros estáis esperando. No pienso decir nada de lo que tenga que arrepentirme mañana. Os hablo de la plata de España y su consiguiente disgusto en mi persona. De la incapacidad de entender cómo un profesional NBA se puede permitir el lujo de fallar tantos tiros libres y cómo un equipo como el nuestro es capaz de jugar acojonados una final.
También os puedo contar que hay una persona que me persigue. Que, cada vez que mi vida sentimental se va al garete, aparece en el lugar menos esperado para darme un abrazo. Es una cosa más que rara dado que ni siquiera vive en España. ¿Casualidad o causalidad? Cómo va a ser causa si nunca sabe nada de mí? ¿Es que uno siempre ve lo que quiere ver? Es que hay una especie de fuerza superior que nos obliga a ir cerrando historias y nos recuerda, periódicamente, que tenemos la obligación de hacerlo?
Mañana Serrat y Sabina, hoy compás de espera.
2 comentarios:
Esa energía existe sin duda alguna.
"No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió"
Yo de eso entiendo un montón.
Y normalmente, uno ve lo que quiere ver, porque la relaidad depende de nuestro punto de vista.
De eso entiendo todavía más.
Pues yo creo que existen casualidades y casualidades que parecen casualidades pero que en realidad no lo son. Y cambiar un sueño por otro no me parece tan malo, ni ver las cosas que pasan como pequeños regalitos de la vida que nos dan un poquito de fuerza para seguir en camino.
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